Inauguración del taller de artesanía Mama Killa: formación en la fabricación de bolsos y complementos para el empoderamiento de las mujeres del barrio Hermanos Ayar
En agosto de 2019, nuestra asociación Los Chicos de Cusco obtuvo de la Región Occitanie la suma de 15.000 euros para ayudar a crear un taller de joyería artesanal en el barrio Hermanos Ayar de Santiago de Cusco. Este taller será una actividad generadora de ingresos que debe promover la emancipación económica de las mujeres implicadas en el proyecto y contribuir a la autonomía financiera del centro social Huchuy Yachaq, promotor del proyecto. En marzo de 2020, cuando nos preparábamos para lanzar el proyecto, la pandemia del Covid 19 paralizaba el mundo, las escuelas y los centros sociales cerraban, y el proyecto Mama Killa quedaba relegado al calendario griego, sobre todo porque se basaba en la vitalidad de la actividad turística de la ciudad de Cusco, ya que las joyas se destinaban sobre todo a la venta en los mercados turísticos de la región.
Por lo tanto, fue necesario, junto con Marlene, directora del centro social Huchuy Yachaq, replantear el proyecto y prever una reconversión hacia una actividad que siguiera generando ingresos para las mujeres, pero que ahora dependiera menos del sector turístico. Así, tras dos años de crisis sanitaria, Mama Killa se convirtió en un taller de producción de bolsos y accesorios denominado «Programa de aprendizaje y emprendimiento para la igualdad de género en tiempos de pandemia».
Hoy en día, el desarrollo de programas de integración y emancipación económica de las mujeres parece más esencial que nunca para reducir la pobreza de las familias y actuar en favor de la protección de los derechos de los niños: la pandemia del Covid 19 ha agravado las desigualdades de género y las mujeres que estaban empleadas principalmente en trabajos informales en el sector del comercio y los servicios se han encontrado sin empleo, sin ingresos y especialmente vulnerables. Según la CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe, 2021), los avances en América Latina en cuanto a la participación de las mujeres en el mercado laboral han vuelto a ser los de hace más de 10 años. La tasa de participación de las mujeres en la población activa era del 46% en 2020, mientras que la de los hombres era del 69%, la tasa de desempleo de las mujeres era del 12% en 2021, es decir, las mujeres han abandonado masivamente el mercado laboral debido a las exigencias del cuidado de sus hogares. Las personas extremadamente pobres son sin duda las más afectadas.
Desde el 10 de mayo, 11 mujeres del barrio de Hermanos Ayar se han incorporado al taller de Mama Quilla para recibir 12 meses de formación, al final de los cuales deberían poder acceder a un empleo asalariado, crear su propia microempresa o contribuir al funcionamiento y la sostenibilidad del taller formando nuevas promociones de costureras. El programa incluye costura, bordado, trabajo del cuero, adquisición de habilidades comerciales y empresariales, así como habilidades psicosociales (autoestima, asertividad, toma de decisiones, etc.).
Queremos agradecer a la Región de Occitanie su apoyo financiero, sin el cual el proyecto no habría sido posible, a la empresa Perus, al Instituto la Trinité de Béziers y a todos los donantes que participan en este programa de aprendizaje y emprendimiento para la igualdad de género en tiempos de pandemia.
Compartimos las noticias del coordinador del proyecto Mama Killa (25/04/2022):
MAMA KILLA – C. Molina
«El proyecto ‘prendiendo y emprendiendo por la igualdad de género en tiempos de pandemia’ se dio a partir de buscar nuevas oportunidades para las madres de familia del asentamiento humano Hermanos Ayar. Iniciamos con la convocatoria colocando carteles alrededor del barrio y entablando conversaciones con las madres interesadas. Las madres al escuchar del proyecto sentían curiosidad, tímidamente preguntaban sobre el costo y el tiempo del taller, se les veía visiblemente alegres al señalarles que era gratuito y que teníamos grandes expectativas en ellas y en su participación.
Esperamos con ansias la primera reunión con los equipos instalados media hora antes, preparándonos para la exposición y los temas a tratar, y dudando sobre la cantidad de madres que asistirían.
Una a una fueron llegando con un poco de retraso y con bebes en los brazos. La reunión se dio entre la bulla de los niños y las madres conversando sobre su día a día. En ese momento entendimos que es necesario tener una guardería para la correcta ejecución del proyecto.
Hicimos una dinámica de presentación donde las madres se mostraban nerviosas, pero emocionadas por lo que podríamos hacer. Algunas de ellas tenían experiencias previas y dirigieron el dialogo alentando a las demás al compromiso consigo mismas y con el proyecto, dando las primeras normas de convivencia y proponiendo horarios.
Al terminar la reunión realizamos las fichas socioeconómicas, fue sorprendente para nosotros ver que la mayoría señala depender de su pareja, parecía algo normal para ellas, y tal vez ni ellas ni nosotros entendemos por completo las consecuencias de esta dependencia.
Después de la reunión nos enfrentamos con grandes dificultades, el buscar un local demoró más de lo esperado. No había profesores disponibles y los que si estaban disponibles no querían dictar por el tiempo que demora ir al barrio. Fue alentador encontrar a un profesor dispuesto y con experiencia, sin embargo, su presupuesto fue desalentador.
Pero no importo, el profesor, la directora, todos estamos comprometidos a realizar un gran trabajo, las necesidades son grandes, el proceso para llevar a cabo el proyecto es y será duro.
Los resultados a efectos prácticos son inciertos, pero por experiencia sabemos que podemos cambiar vidas, tenemos la gran oportunidad de empoderar a 20 mujeres*. Que estas 20 mujeres sean un ejemplo a seguir en el barrio, que logren identificar la violencia en todas sus formas y nunca más la permitan. Tenemos la oportunidad de que generen sus ingresos económicos, sean independientes y cambien su realidad.
Quisiera concluir señalando que entre las muchas cosas alentadoras de este proyecto destacan. Primero el gran compromiso de los agentes involucrados desde la directora hasta los voluntarios, quienes, entendiendo el objetivo final, ponen todo de su parte. Y segundo el gran dinamismo y asertividad de las madres de familia quienes aun con el proyecto sin iniciar ya han ayudado bastante. Gracias a lo cual tenemos un profesor con experiencia y entusiasmo con el proyecto, un local casi terminado para su uso, 23 madres comprometidas y emprendedoras y casi 6 máquinas de coser en funcionamiento (pronto serán 10).»
*Al final 11 madres sigen la capacitacion.
Noticias del 26 de mayo
«El 2 de mayo 2022, el equipo de coordinación y de capacitación con las mujeres organisaban el taller (actividades de traslado, instalación, organización de ambientes, compra de materiales necesarios, reparación de maquinas, …). La capacitación technica empezó el 10 de mayo con unos talleres de bordado con las 11 mujeres comprometidas. 24 mujeres quisieran asistir a los cursos pero sin solución de guardaria desde el empezo de la capacitación sea dificil para ellas. Las mujeres están a cargo del cuidado de los hijos e hijas en las horas de la tarde ya que en las mañanas asisten al jardín, colegio y academias pre universitarias. Sin embargo, esta situación cambia cuando hay niños menores de 2 años ya que las mujeres se encargan de cuidarlos todo el día y, además, deben alimentarlos con leche materna lo cual implica una cercanía constante de la madre y el hijo. Por ello, en el horario de la tarde las mujeres se encargan del cuidado de todos los hijos e hijas. De acuerdo a la información recopilada y las opiniones de todas las participantes, ellas tienen la predisposición de asistir a los talleres del proyecto durante los 12 meses de duración, sin embargo, el cuidado de los hijos e hijas les preocupa porque no tienen familiares cercanos que puedan brindarles ayuda.
Ritmo : de 3:30 a 7:30 pm de lunes a viernes.»
El proyecto de guardería esta en pausa por el momento sin medios financieros.